miércoles, 26 de marzo de 2008

Freud:¿Qué me pasa Dra.Hilton?

Coco Chá5.


En el diván sueña

Un angelito dormido

Un detalle perdido

Un tiempo que pudo perdonar

Algunos días si, otros no

Años acostumbrados

A la estirpe del miércoles

Y antes de contar el final

de esta historia Dr.,

me gustaría despertar.


Una de las canciones más hermosas del mundo.Israel Kamakawiwo'ole

Un día por casualidad escuchas una canción sencilla, absolutamente bella



y no sabes donde situarla , te eleva y conmueve, te estremece y vence como un ave fugaz … sobre el arco iris de un mundo maravilloso. Haced la prueba intentad escribir, mientras escucháis vuestro interior, lucháis contra algo que no se puede explicar, pero os reconforta.



Israel Kamakawiwo‘ole . "Bruddah Iz" , (1959– 1997) fue un popular cantante hawaiano. Conocido como Iz, se dio a conocer fuera de Hawái cuando su disco Facing Future salió a la venta en 1993 incluyendo su potpourri mezclando los antiguo clásicos "Somewhere Over the Rainbow / What a Wonderful World". Su combinación de estas canciones ha sido parte del arreglo musical de varias películas, entre las que se cuentan, Descubriendo a Forrester, ¿Conoces a Joe Black?, 50 primeras citas, así como capítulos de la serie de televisión ERcuando muere el doctor Green en Hawai).Durante la mayor parte de su vida adulta Iz fue obeso llegando a pesar 340 kg. Fue hospitalizado en numerosas ocasiones, y murió afectado de problemas respiratorios derivados de su enorme peso el 26 de junio de 1997 a los 38 años de edad. Su cuerpo fue velado en el edificio del Capitolio en Honolulu, con la bandera a media asta en los edificios estatales. Luego de cremado las cenizas de Iz fueron esparcidas en el océano frente a la playa de Makua.







Iz se distinguía por pertenecer a una casi desaparecida minoría que sólo tienen antecesores hawaianos nativos. Iz es recordado por su carácter siempre alegre y positivo, y por su amor a la tierra y al pueblo hawaiano.



Somewhere over the rainbow
Way up high
And the dreams that you dreamed of
Once in a lullaby
Somewhere over the rainbow
Blue birds fly
And the dreams that you dreamed of
Dreams really do come true
Someday I’ll wish upon a star
Wake up where the clouds are far behind me
Where trouble melts like lemon drops
High above the chimney tops thats where you’ll find me
Somewhere over the rainbow bluebirds fly
And the dreams that you dare to, oh why, oh why can’t I?
Well I see trees of green and
Red roses too,
I’ll watch them bloom for me and you
And I think to myself
What a wonderful world
Well I see skies of blue and I see clouds of white
And the brightness of day
I like the dark and I think to myself
What a wonderful world
The colors of the rainbow so pretty in the sky
Are also on the faces of people passing by
I see friends shaking hands
Saying, “How do you do?”
They’re really saying, I…I love you
I hear babies cry and I watch them grow,
They’ll learn much more than
We’ll know
And I think to myself
What a wonderful world
Someday I’ll wish upon a star,
Wake up where the clouds are far behind me
Where trouble melts like lemon drops
High above the chimney top thats where you’ll find me
Somewhere over the rainbow way up high
And the dreams that you dare to, oh why, oh why can’t I?

video

miércoles, 12 de marzo de 2008

Otro Sin Castillo

La bañera azul
El mejor poema escrito esta semana
son los doce tomates hechos crecer
en la buena tierra de la bañera azul
que se buscó otro oficio en la terraza.
Como yo, están verdes todavía.
Y como yo esperan cada tarde la lluvia y el sosiego.
Busco entablar conversación, la mínima,
pedirles el secreto de vegetar en gloria
dorados por el sol y amamantados por la noche.
Deseo esa noble genética que los hace nacer
y morir, irrepetibles, en sus pequeños destinos
que cruzan del amarillo al verde humildísimo
hasta apagarse en sucesivo rojo.
Los doce tomates que alumbran mi azotea
han nacido también de las manos de Dios.
Tan sólo reclamo mi derecho a ser tratado
por él, de igual manera, con igual cuidado.
Pido que ajuste el mecanismo de su obra
y ese argumento de la huida: el tiempo.
Nacer en primavera, disolverse en invierno
desconocer la silenciosa edad de la tortuga.
Sólo ser cada año, una vez, ese estallido
de antiguo asombro: la renovación exacta
del jazmín, la locuacidad de la albahaca
y los tomates, amándose de noche,
hasta amanecer repentinamente soles
en la sonrisa de la tierra.
Esteban Peicovich(de “La bañera azul”, 1995)